ha dado a conocer un informe sobre la evolución de la transición energética libre de carbón en la Unión Europea. Indican que estamos bien encaminados en esa dirección. Los datos muestran que las emisiones de energía de carbón han caído en un 43% desde 2013. Pero, ahora, los altos hornos se han convertido en los mayores emisores de CO2 de la UE.
Sin embargo, Ember Climate informa que la generación de energía con carbón sigue siendo responsable del 30% de las emisiones ETS de la UE. “El trabajo está lejos de haber concluido”, añaden. Esto es particularmente cierto para las centrales eléctricas alimentadas con lignito, que han experimentado una reducción más lenta de emisiones.
Resulta significativo que, actualmente, los altos hornos han pasado a ser los mayores emisores de la UE. Y es así en países como España, Países Bajos, Reino Unido, Francia, Austria, Finlandia y Eslovaquia. El sector del acero representa el 8% de las emisiones ETS de la Unión Europea.
El carbón en Europa
Las emisiones del sector eléctrico cayeron un 13% (129 TM), debido al desplome del carbón en Europa en 2019. El carbón duro (antracita) cayó un 28% (81 TM); el lignito cayó un 18% (60 TM). Todo ello compensado por un aumento del 3% en la generación de gas y petróleo. El informe indica que la mitad de la reducción de emisiones del sector eléctrico proceden de la sustitución del carbón por gas. Mientras, la otra mitad, de nuevas instalaciones eólicas y solares.
Las emisiones de energía del carbón han bajado un 43% desde 2013: el carbón duro ha bajado un 57% y el lignito ha bajado un 26%. En ese tiempo, las emisiones restantes de generación con gas y petróleo han aumentado sólo un 7%. La consecuencia ha sido una caída del 29% en las emisiones totales del sector eléctrico en solo seis años. La energía eólica y la energía solar han reemplazado al carbón, ayudadas por el precio de las emisiones y las políticas nacionales para eliminar del carbón.
Las emisiones industriales cayeron un 2%. Esto se debe más a una caída en la producción industrial que al aumento de la eficiencia. La producción industrial cayó un 0.6% en 2019, según EUROSTAT, incluida una caída del 5% en la producción de acero.
Las emisiones de la aviación aumentaron 7%. Jet2 tuvo el mayor aumento, del 11%. El mayor emisor de aviación, Ryanair, aumentó en un 6%, y sigue siendo el noveno mayor emisor europeo.
El camino del sector eléctrico
El sector eléctrico representó más de la mitad (52%) de las emisiones ETS de la UE en 2019.
Incluso después de un descenso del 29% en los últimos seis años, continúan los recortes en las emisiones del sector eléctrico.
Las plantas de energía de lignito emitieron el 17% de todas las emisiones ETS de la UE, pero generaron solo el 9% de la electricidad de Europa. El carbón duro fue responsable de otro 13% de las emisiones, a pesar de generar solo el 10% de la electricidad de Europa.
La generación restante de gas + petróleo constituyó el 22% de las emisiones ETS de la UE. En total, se emitieron 844 millones de toneladas de CO2 del sector eléctrico en 2019. Es decir, un 52% del total de emisiones ETS de la UE.
Se necesita más energía eólica y solar. Según el análisis, las energías renovables deben duplicar su promedio anual de 2010-2019, durante el periodo 2019-2030 para cumplir con los objetivos de la UE.
Eliminar las centrales de lignito, una prioridad
Según el informe,
“Para garantizar una mayor disminución rápida de las emisiones, la eliminación gradual de las centrales eléctricas de lignito es una prioridad urgente”.
Los seis principales países que quedan con lignito son: Alemania, Polonia, Chequia, Rumania, Bulgaria y Grecia.
Sus emisiones de lignito son responsables del 17% de todas las emisiones ETS de la UE, pero sólo generan el 9% de la electricidad europea.
De los seis países, sólo Grecia tiene un cronograma suficientemente ambicioso para eliminar el lignito. No así Alemania, que prevé su eliminación en 2038. Según el informe, no sólo es incompatible con los Acuerdos de París la fecha, sino que es “una abdicación del liderazgo climático exigido a la economía más grande de la UE. En el resto de países, o no se contempla o se está a la espera de fijar fecha de finalización.
En cuanto al carbón duro está en vías de eliminación gradual, con la excepción de Polonia. Las emisiones de carbón duro de Polonia superaron a las de Alemania en 2019 por primera vez. Esto significa que la participación de Polonia en las emisiones de carbón duro de Europa ha pasado del 16% en 2013 al 33% en 2019. La energía del carbón de Polonia representa el 62% de sus emisiones.
Las centrales eléctricas de lignito siguen dominando la lista de los 10 principales emisores de Europa.
Los altos hornos, entre los principales emisores
Los altos hornos a carbón en 2019 fueron el mayor emisor de CO2 en siete países: UK, Francia, España, Austria, Países Bajos, Finlandia y Eslovaquia.
“Es la primera vez que las plantas siderúrgicas en España y los Países Bajos han tenido mayores emisiones que las plantas de carbón”.
El sector del acero representa el 8% de las emisiones ETS de la UE. Aproximadamente el 80% de estas emisiones provienen de sólo 30 altos hornos. La tecnología para fabricar acero sin carbón se está desarrollando rápidamente. El uso de hidrógeno ahora se considera una solución probable a largo plazo. Eso sí, necesitará un mayor apoyo político para el despliegue a gran escala.
Para el acero reciclado, la producción sin carbón ya es posible a través de hornos de arco eléctrico (EAF) alimentados por electricidad renovable.
Según el informe, se necesita una sobre-construcción de energía eólica y solar en toda Europa para ayudar a impulsar la transición del acero.
Sumando el sector eléctrico y el acero, la energía eólica y solar podría reemplazar al menos el 60% de las emisiones ETS de la UE de 2019.
El informe recomienda utilizar los momentos de salida del COVID-19 para que los gobiernos protejan y creen empleo. Añaden que la salida del confinamiento brinda la inversión e innovación necesarias para que la industria del acero avance en el camino hacia un acero libre de carbón.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela