Datos de Naciones Unidas apuntan que casi el 70 % de la población residirá en núcleos urbanos en 2050, frente al 54 % actual. Supone esto que la creación de ciudades sostenibles resulta clave para alcanzar la neutralidad climática tan ansiada. Aguaduna es un proyecto de smart city brasileño que adelanta algunas de las soluciones que podrían ayudar a alcanzar la meta de la descarbonización
Las grandes urbes del planeta se han comprometido a alcanzar la neutralidad climática en el año 2050. Esto significa que para entonces sus emisiones netas de gases invernadero deberán ser iguales (o menores) a las que se eliminan a través de la absorción natural del planeta.
Pese a que actualmente, sólo ocupan el 3% de la superficie de la Tierra, los núcleos urbanos consolidados son ya responsables del consumo de entre un 70 y un 75% de los recursos del planeta, y emiten alrededor del 70% de los gases de efecto invernadero producidos a nivel global, según el informe “Desacoplamiento a nivel de ciudad” de Naciones Unidas. Un efecto que puede ser mayor si se certifican los cálculos de la ONU, que aseguran que las ciudades acumularán el 70% de la población mundial en 2050 frente al 54% actual.
Aguaduna, ejemplo de ciudad eficiente
es un proyecto hispanobrasileño en el estado de Bahía (Brasil) que apuesta por convertirse en un modelo replicable de ciudad 100% resiliente y circular.
Además de contar con un tamaño medio -espera tener 60.000 habitantes en el futuro- las soluciones integradas le permitirán integrarse en su entorno natural tropical de manera sencilla y natural. El proyecto apuesta por un modelo basado en flujos circulares de recursos y reduciendo el impacto climático.
Este sistema pretende generar oportunidades de trabajo para los residentes y habitantes del entorno, y transformarse en una ciudad próspera donde las empresas, la comunidad y la administración trabajarán juntas para aprovechar al máximo los recursos renovables, reducir el desperdicio, y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
La transición que se traducirá en independencia energética a través campos de captación fotovoltaica, reutilización de aguas pluviales, sistemas de acondicionamiento pasivo de los edificios, la circulación de vehículos únicamente impulsados por energías limpias, reducción al 50% de pavimentos en los espacios públicos y edificación de solo el 14% de la superficie total del suelo para garantizar la alta permeabilidad del mismo, además de la aplicación de tecnologías como big data o blockchain para gestionar de los distintos servicios de la ciudad de forma eficaz, transparente, segura y descentralizada.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.
Muito contento do este proyecto interesa saber sobre los imoves a venda si alguien aportará una dirección o contacto estaría muy agradecido.