La Asociación Empresarial Eólica (AEE) se ha posicionado con respecto a la Proposición de Ley de gravámenes temporales para: empresas energéticas, entidades de crédito y establecimientos financieros de crédito. La Proposición de Gravamen se acaba de presentar y pretende recaudar 2.000 millones de euros al año de los ingresos netos en 2022 y 2023.
AEE indica que consideran imprescindible mantener los principios de una regulación energética adecuada. Debe estar justificada de forma objetiva, sin arbitrariedades tanto en la elección de los actores afectados, como en los criterios para la selección de estos.
Afirma que en ningún caso, la nueva regulación debe mermar la confianza a futuro de los inversores ni penalizar los vectores de cambio energético. Precisamente, consideran que las energías renovables son los mejores instrumentos para solucionar la coyuntura económica y energética actual. Y tanto en términos de inflación, como de seguridad energética y de competitividad para nuestra economía.
Adicionalmente, la asociación señala dudas sobre si la medida propuesta facilitará efectivamente la bajada del precio de la energía para los consumidores; incluso si podría generar efectos contrarios por el propio funcionamiento del mercado.
AEE señala los riegos inherentes a la propuesta
AEE identifica los riesgos inherentes a la propuesta que habría que evitar:
- La medida podría poner en riesgo la rentabilidad razonable de las instalaciones renovables con Régimen Económico Regulado.
- Además, puede implicar una paralización temporal de ciertos encargos a la industria. Y justamente en unos momentos complejos para la situación financiera de nuestros fabricantes en España y Europa.
- La medida podría conllevar la revisión de contratos PPAs formalizados en estos años por los actores que se van a ver afectados.
Asimismo, opina, este tipo de medidas no ayuda al avance sostenido del sector renovable en España, condicionando las inversiones futuras. Y crea incertidumbre sobre la estabilidad regulatoria.
El sector eólico considera que hay que ser muy cautos y cuidadosos con las señales que se envían al mercado. Pueden poner en riesgo las inversiones o el avance necesario de las renovables en España.
Respecto a la eólica
La AEE añade que en el contexto actual de emergencia energética y climática, es preciso recordar que cada aerogenerador que se instala en España supone:
- En ahorro de importaciones de gas: 4,2 millones de euros/año. Cumpliendo la senda establecida por el PNIEC (2,2 GW/año), el ahorro sería de 1.848 M€/año, adicionales por las nuevas máquinas.
- En ahorro económico y climático por las emisiones evitadas a la atmósfera: 435.000 €/año. Cumpliendo la senda establecida por el PNIEC (2,2 GW/año), el ahorro económico sería de 191 M€/año, adicionales por las nuevas máquinas.
En total, cumpliendo el PNIEC, sumando ambos conceptos, la instalación de nueva potencia eólica en España supondría un ahorro anual de 2.039 millones de euros.
Finalmente, indican que el ritmo de instalación de renovables no es el adecuado en España. Durante 2021, se instalaron 0,8 GW eólicos cuando el objetivo anual del PNIEC es 2,2 de GW. Y terminan añadiendo:
“Estamos muy por debajo del ritmo necesario para cumplir con los objetivos españoles y estas medidas no ayudan a acelerar el ritmo de instalación”.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela