La industria automovilística se ha reunido en el foro “Perfilando la nueva fiscalidad del automóvil”, organizado por CVO y promovido por Arval. En este foro se han debatido las necesidades del sector y se han propuesto medidas, en un momento en el que se está planteando una reforma de la fiscalidad del automóvil.
En un momento en el que el Gobierno plantea una revisión de la fiscalidad del automóvil, el Observatorio del Vehículo de Empresa (CVO), ha reunido a los principales actores del sector en este foro para analizar al más alto nivel hacia dónde debe ir esta reforma y realizar un análisis económico, informa en un comunicado.
En esta jornada han participado el vicepresidente ejecutivo de Anfac (Mario Armero), junto con los presidentes de Aniacam (Germán López Madrid), Ganvam (Juan Antonio Sánchez Torres), la Asociación Española de Renting (Agustín García) y el secretario general de Faconauto (Blas Vives). Entre todos han puesto sobre la mesa las medidas fiscales concretas que hay que poner en marcha para sacar adelante una legislación que impulse la industria del automóvil en su sentido más amplio.
Moderados por el director del CVO, Manuel Orejas, en este foro se ha debatido sobre aspectos de actualidad tales como la conveniencia o no de eliminar el impuesto de matriculación, la adecuación o no del impuesto de circulación a criterios medioambientales, la necesidad o no de un plan de incentivo al achatarramiento o las restricciones de circulación a los vehículos como medida para mejorar la calidad del aire, entre otros temas.
Fiscalidad del automóvil
El
foro que ha arrancado con la ponencia de José Ramón Rallo, Doctor en Economía, director del Instituto Juan de Mariana, y profesor en el centro de estudios OMMA y en IE University. Para Rallo, la fiscalidad del automóvil debería financiar el mantenimiento de servicios comunitarios (sobre todo, las carreteras y compensar las externalidades negativas que genera (medioambientales, pérdidas de tiempo y recursos por los atascos, molestias en las ciudades…).
En ambos casos, “el impuesto ha de estar relacionado con el uso que se haga de las infraestructuras y las externalidades negativas que se generen. El impuesto debería tener en cuenta los costes reales que estos factores generan, es decir, lo que se paga ha de estar vinculado al uso real y al perjuicio real que se está generando. Se trata de buscar precios fidedignos, no de dar subvenciones encubiertas”, asegura Rallo.
Para José Ramón Rallo, la fiscalidad actual solo proporciona soluciones parciales e ineficientes. “La solución óptima que yo propondría sería el establecimiento de peajes dinámicos, según el lugar y el momento, que incorporen el coste de los servicios comunitarios y las externalidades medioambientales y no medioambientales. No es complicado técnicamente, pero sí desde un punto de vista político».
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.