El Club de Expertos de EnergyNews cuenta esta semana con un artículo de opinión de Raquel Montón. La responsable de la Campaña antinuclear de Greenpeace pone el foco en el acuerdo alcanzado entre Gobierno y Unidos Podemos, pero con especial atención en la protección medioambiental. Montón analiza el contexto que envuelve un proceso ya irreversible hacia un nuevo modelo energético, pero advierte: la velocidad que se imponga en la transición energética marcará notablemente los resultados.
He leído con interés el apartado dedicado a la transición energética en el acuerdo del Gobierno y Unidos Podemos desde una mirada que valora la protección del medio ambiente incluyendo también la perspectiva económica y de equidad.
El precio de la luz es el concepto sobre el que se arma este acuerdo y es importante porque es gracias a ella, y a que podamos pagarla, con lo que hacemos funcionar muchas de las pequeñas y grandes cosas de nuestra vida; pero es todavía más importante el precio que pagaremos si no cambiamos rápidamente de modelo energético porque con él estamos aniquilando las pequeñas y grandes cosas de la humanidad.
Ambos precios van de la mano, disminuyen con un modelo 100% renovable y eficiente. El cambio ya se está produciendo por motivos económicos debido a la competitividad de las renovables, y no tiene vuelta atrás; pero la velocidad de la transición es lo que marcará la diferencia, entre asumir un calentamiento global ya en curso o llevarlo a circunstancias extremadamente graves, injustas e irreversibles.
Respecto a las propuestas consensuadas entre Gobierno y Unidos Podemos se articulan fundamentalmente en torno al sistema eléctrico, y si bien es fundamental que la electrificación sea el canal para hacer sostenible el modelo energético en su conjunto, deja sin mostrar la visión integral e imprescindible que se necesita para la transición ecológica hacia un sistema energético inteligente, eficiente y 100% renovable.
Propuestas del acuerdo entre Gobierno y Unidos Podemos
- Ley de Cambio Climático y Transición Energética. Un anuncio no es suficiente, es imperativo que esta ley contribuya justa y responsablemente con el objetivo recogido en el Acuerdo de París de no superar la temperatura media global de 1,5ºC.
- Las reformas estructurales que el sistema eléctrico necesita. Plantear la desaparición de los injustos “beneficios caídos del cielo” que disfruta la hidráulica y la nuclear en este sistema marginalista de configuración de precios, ambas perfectamente amortizadas, es una estupenda noticia. No obstante en el caso de la hidráulica, debería dirigirse su gestión a estar disponible en los momentos críticos del sistema y estar controlada por el operador del sistema (REE), en vez de la actual utilización por parte del actual sistema especulativo sin duda sería una mejora importante que no figura en este acuerdo. Respecto a las centrales nucleares, el límite que plantea el acuerdo deberá regirse por los resultados de una auditoría independiente y transparente de costes, y esto es muy distinto a dar validez a la contabilidad de las compañías eléctricas que dicen “que están en pérdidas”. También se van a revisar los pagos por capacidad, y es un paso en la buena dirección para limitar estas subvenciones y dejarlas como último recurso, pues hasta el momento los pagos por capacidad han permitido mantener un sistema eléctrico viejo y contaminante, en el que hemos gastado en los últimos 20 años, casi 18.000 millones que hemos pagado en la factura de la luz.
- Modificar la factura eléctrica para reducir el porcentaje que representa el término de potencia y que el término variable sea incrementado en función de la energía consumida, es un gran avance para fomentar la eficiencia y ahorrar dinero y CO2.
- El Bono social y la Estrategia Nacional contra la Pobreza Energética. Sin duda los más vulnerables deben ser justamente tratados porque la energía, además de ser un input productivo, es un bien esencial para las personas, y debe ser considerada de manera diferencial bajo esta perspectiva. Las renovables, el autoconsumo, la electrificación integrada, las gestión de la demanda, la rehabilitación energética de las viviendas y la eficiencia en todos sus aspectos, son los pilares sobre los que, además de construir un modelo sostenible, alcanzar un modelo solidario y, por ello, esta estrategia debería ser parte integral del modelo.
- Protección y empoderamiento del consumidor eléctrico. Además de pedir que los datos no sean accesibles a terceros sin consentimiento, hay que pedir bien alto que si lo sean para el consumidor para que pueda ser un miembro activo del sistema. De esta manera podremos empezar a “gestionar la demanda”, esto es que el consumidor pueda modificar «cuanto y cuando» consume, con el fin de lograr no sólo el ahorro neto de energía, sino también un uso más eficiente de la misma, por el cual recibirá una retribución.
- Fomento del autoconsumo eléctrico. Es importante valorar con equidad la retribución de la energía vertida, para ello el valor deberá ser el instantáneo en el mercado. El balance neto es también bien recibido para fomentar y facilitar el autoconsumo, y a ello se podría unir el autoconsumo compartido, virtual y muchas más opciones que faciliten la entrada de energía limpia a la red, la eficiencia que implica el autoconsumo, y la participación de los ciudadanos como generadores en el sistema.
- La movilidad eléctrica, es imprescindible acabar con la subvención de que disfruta el diésel al pagar menos impuestos, y la recaudación adicional debe servir para impulsar la transición a los servicios de movilidad eléctrica compartida y eficiente. Las ayudas destinadas a la compra de vehículos eléctricos, no deben servir sólo para engordar las cuentas de los fabricantes de coches, deben incentivar el cambio de modelo del sector de la automoción que ya está en marcha, y para ello estas ayudas deben pensarse con esta premisa.
- Plan de rehabilitación de viviendas. Sin duda una excelente iniciativa que podría ir acompañada de la cuantificación del ahorro que supone reducir las emisiones de CO2 rehabilitando edificios, para poder demostrar que esto no es una subvención, sino una inversión con un retorno económico seguro
El acuerdo entre Gobierno y Unidos Podemos recoge aspectos esenciales y muy valiosos, aunque le falta la velocidad que la transición energética necesita para afrontar las realidades del cambio climático, sería deseable que el resto de formaciones políticas se sumaran para dar ese mayor impulso.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.