La Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y la Universidad de Stanford (Estados Unidos) han publicado los resultados de un estudio llevado a cabo por un equipo internacional de científicos que aborda la capacidad de absorción de los árboles y las plantas a partir de 2100.
El estudio llevado a cabo por científicos de ambas universidades arroja otra futura hipótesis derivada del calentamiento global. ¿Y si los árboles dejan de absorber dióxido de carbono?
«Mantener los combustibles fósiles en el suelo es la mejor manera de limitar el calentamiento adicional«, señala el autor principal del estudio, César Terrer, un académico postdoctoral en ciencias del sistema de la Tierra en la Escuela de Ciencias de la Tierra, Energía y Medio Ambiente de Stanford. «Pero detener la deforestación y preservar los bosques para que puedan crecer más es nuestra siguiente mejor solución».
El CO2, combinado con el nitrógeno y el fósforo, suponen nutrientes que hacen posible que los árboles crezcan y prosperen. El problema empieza cuando estos necesitan grandes cantidades adicionales de nitrógeno y fósforo debido al imparable aumento de concentraciones de dióxido de carbono. Entonces, ¿Cuánto tiempo podrán seguir los árboles absorbiendo dióxido de carbono si disponen de nitrógeno y fósforo limitados?
Rob Jackson, profesor titular de Michelle y Kevin Douglas en Ciencias del Sistema Terrestre en Stanford y coautor del estudio explica: «Plantar o restaurar árboles es como poner dinero en el banco. El crecimiento adicional del dióxido de carbono es el interés que ganamos en nuestro equilibrio. Necesitamos saber lo alta que será la tasa de interés de nuestra inversión en carbono».
El estudio también hace mención de manera reivindicativa a la situación actual de deforestación de importantes bosques tropicales como los de Indonesia, Congo o Amazonía, que suponen un activo fundamental para el almacenamiento de los excedentes de carbono.
Metodología del estudio
Con el objetivo de encontrar un escenario preciso acerca de la capacidad de plantas y árboles para absorber CO2, el método principal seguido por los investigadores ha consistido en sintetizar datos sobre todos los estudios sobre este ámbito realizados hasta la fecha, incluidos algunos que los investigadores ya habían dirigido.
Mediante modelos estadísticos, datos satelitales y aprendizaje automático, los investigadores han sido capaces de determinar qué factores climáticos, así como diferentes nutrientes, están limitando la capacidad de árboles y plantas de absorber dióxido de carbono.
Resultado de todo ello es la previsión de que la biomasa de las plantas habrá crecido a final de siglo en un 12% como consecuencia del crecimiento simultáneo de los niveles de dióxido de carbono, lo que equivale a la absorción de emisiones actuales de emisiones fósiles por un periodo de 6 años.
La deforestación, freno a la absorción de CO2
El estudio también hace mención de manera reivindicativa a la situación actual de deforestación de importantes bosques tropicales como los de Indonesia, Congo o Amazonía, que suponen un activo fundamental para la absorción de CO2.
César Terrer afirma: «Ya hemos sido testigos de la tala indiscriminada en los bosques tropicales vírgenes, que son los mayores reservorios de biomasa en el planeta. Podemos perder una herramienta tremendamente importante para limitar el calentamiento global».
Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense. Redactor en energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es.